Tal y como habíamos prometido en la reseña que sobre su libro de poemas hicimos hace unos días, aquí tenéis el resumen de nuestro encuentro/entrevista con Alicia Rodríguez.
Nos citamos con Alicia en la terraza de un bar de la Plaza de la Virreina en el barrio de Gràcia, donde reside. Mientras espero, recibo un mensaje de ella advirtiéndome que llega con cierto retraso debido a que una reunión donde ha estado se ha alargado más de lo previsto. No importa; lo cierto es que el tiempo es de lo más agradable, y estar sentado en una terraza de Gracia tomándose una caña y curioseando un periódico no es precisamente una situación en la que uno tenga que impacientarse por nada. Cuando por fin aparece, lo hace con una sonrisa franca y amable, y dando mil disculpas por su retraso. Hay algo en su expresión que te hace sentir confiado y cómodo al instante. Alicia es una persona con muchos frentes abiertos al mismo tiempo en su calidad de promotora, periodista y, ahora, escritora, y yo solo puedo agradecerle que haya podido dedicarnos un tiempo. La conversación fluirá con agilidad. Hay muchos temas sobre los que queremos interrogarla. Lo que podéis leer a continuación, en realidad, no es más que un resumen de los muchos asuntos que irán surgiendo a lo largo de la charla.
-Empecemos con tu recién publicado libro de poemas. El pasado martes 12 estuvimos en la fiesta de 5º aniversario de 66 rpm, la editorial que ha editado el libro y que, está claro, mima mucho (en el mejor sentido) a sus autores. Aunque la mayor parte de ellos han publicado trabajos que tienen un vínculo más o menos explícito con el mundo de la música, hay excepciones como es tu caso. El libro se llama “Fénix”. ¿A qué hace referencia este título?
Obviamente, cuando pensamos en un Fénix nos viene a la cabeza algo que renace de sus cenizas, que se vuelve a reencarnar. Esa es la idea que plana sobre todo el libro: la necesidad de volver a empezar, de encontrar nuevas salidas, luz y esperanza. Los poemas tienen un rastro obvio de melancolía, pero van siempre en esa dirección de volver a levantarse. Es ante todo un gran homenaje a todos aquellos, familiares, amigos, compañeros, que en tiempos de dificultades y contra viento y marea siguen luchando.
-¿La poesía ha formado parte siempre de tu vida? ¿Los poemas del libro llevan tiempo gestándose o los has creado en un periodo más o menos concreto?
Respecto a la primera pregunta, honestamente no. Es decir, no como escritora, aunque haya podido leer más o menos poesía. Los poemas surgen en un periodo que abarca el último año aproximadamente, o sea que se puede decir que son el reflejo de cosas que he tenido la necesidad de sacar de dentro en este instante de mi vida. En principio no tenía claro siquiera si los quería publicar realmente, pero algunos amigos, como Nacho Vegas, me animaron a hacerlo después de leerlos. Además, a Nacho tengo que agradecerle, de nuevo, que haya escrito un precioso prólogo para el poemario. La espoleta final fue cuando Alfred Crespo y May, de 66 rpm, me dicen que están dispuestos a editar el libro, cosa que, obviamente, me ha hecho mucha ilusión.
-¿Podrías decirme algunos poetas que te hayan influenciado o que, por lo menos te gusten especialmente? ¿Quizá alguna recomendación para el inminente Sant Jordi/Día del libro?
Hay una antología de escritoras de la generación beat (“Beat attitude: Antología de mujeres poetas de la generación beat” publicado por Bartleby Editores) que acabo de leer y que me ha encantado. Cuando se hace referencia a dicha generación siempre se tiene presente a nombres como Kerouac, Burroughs, Ginsberg, pero raramente se habla de mujeres como Elise Cowen o Joanne Kyger, que también formaron parte de ella, algunas con tanto talento o más que los escritores antes mencionados. También me gusta mucho el poeta asturiano Ángel González, perteneciente a la generación del 50. Igualmente, tengo que mencionar a Gil de Biedma. Y claro, tengo muy presentes siempre a poetas como Baudelaire, Rimbaud… En prosa, hay escritores como Javier Pérez Andújar, Javier Marías o Carlos Zanón, que para mí es un crack de la novela, que siempre me gusta recomendar.
Pasemos a hablar de tu faceta como promotora musical. Llevas en ello mucho tiempo. En tu página de internet, Aliciaweb, podemos ver que has llevado a un gran número de artistas tanto nacionales como internacionales. Desde Kiko Veneno a The Godfathers. ¿Cómo crees que ha evolucionado tu trabajo teniendo en cuenta los veloces cambios de nuestra sociedad, por ejemplo, en el ámbito tecnológico, las nuevas formas de consumir música, y la manera que en general tiene la gente de ver en la actualidad la cultura?
Está claro que las cosas han cambiado muchísimo desde que empecé; en algunos aspectos para bien y en otros no tanto. El consumo de música se ha vuelto algo prácticamente gratuito, algo en lo que, sinceramente, no estoy de acuerdo. Los artistas trabajan duro para sacar un trabajo a la calle y no es justo que no se les pague por ello, al igual que se debe pagar a cualquier trabajador por realizar la tarea que sea. Por otro lado, las nuevas tecnologías e internet facilitan salir, hasta cierto punto, del anonimato, y darse a conocer. Desde el punto de vista de un promotor tienes más herramientas de comunicación; puedes hacer llegar a más gente la información de que, por ejemplo, has montado una gira de un grupo. Por otra parte, existe la idea generalizada de que los músicos ahora viven de los conciertos y que estos se llenan sistemáticamente, pero eso no es cierto. Muchas veces cuesta muchísimo llenar una pequeña sala. Lo que sí triunfa son los festivales, pero esa es otra historia.
-De artistas que llevas ahora me llama mucho la atención Santi Campos; me gustan mucho las letras de sus canciones. Háblame de él y de algún otro músico que estés promocionando en la actualidad.
A Santi lo pudiste ver en la fiesta de 66 rpm el pasado martes. En principio no tenía previsto actuar pero de forma espontanea acabó haciéndolo y tocó una de las canciones de su último trabajo “Cojones”. Qué te puedo decir; pues que es absolutamente genial, su disco es fantástico y en directo lo da todo. Es alguien que hay que seguir. Al igual que Xebi SF, que me parece otro portento; un músico de enorme talento. A nivel internacional tengo que mencionar a The Cat Empire, una banda australiana ya veterana que lo mezcla prácticamente todo (ska, jazz, funk, rock) y que han sacado su sexto disco en marzo. Han tocado en festivales como el BBK de Bilbao o el Cruïlla de Barcelona con extraordinarias críticas. En noviembre estarán por aquí y podremos disfrutarlos de nuevo en directo.
-Antes has mencionado el tema de los festivales. Tú has trabajado en la organización de varios de ellos y querría que me hablaras de uno en concreto que ya se acerca: el Polifonik Sound.
¿Qué puedo decirte? Es un Festival que me encanta, en primer lugar por su ubicación en Barbastro (Huesca), por lo bueno que es el cartel (este año actúan artistas como Izal, Delorentos, L.A., Miss Cafeina, Egon Soda…), por el buen rollo que se genera en éste, con abonos y precios en general más que asequibles… Creo que esta edición va a ser una gran fiesta. De verdad, si alguno de vuestros lectores no lo conoce, que se acerque a Huesca. Seguro que lo pasan genial.
-¿Crees que existe una cierta burbuja en nuestro país en relación a la proliferación de festivales?
La ha habido, desde luego. Todos lo hemos visto en festivales que han aparecido y desaparecido en poco tiempo. A veces con un par de cabezas de cartel muy populares que querían atraer a un gran número de público descuidando una programación completa hecha con auténtico esmero y cariño. Ha habido excesos claros. Todos recordamos el Summercase en Barcelona, un festival que quería ser algo así como un Primavera Sound II tan solo un mes después que se celebrase el Primavera, pero con un cartel únicamente de grandes nombres, algo muy difícil de lograr tanto desde el punto de vista económico como de programación… Ahora tenemos el Mad Cool en Madrid, una ciudad que sin duda merece un festival así, pero cuyo cartel va dirigido a un público parecido al del Azkena en Vitoria al cual tanto le ha costado consolidarse. Parece que sin querer nos hacemos una competencia casi feroz entre nosotros.
-Ya que estamos con el tema de la música en directo ¿cómo ves la nueva normativa que el actual equipo de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona quiere aprobar y que, en principio, facilitaría que hubiera más locales de música en directo, y que los que ya hay no vivan con la incerteza de no tener claro si están cometiendo alguna irregularidad legal que les pueda causar problemas?
Indiscutiblemente es una muy buena noticia para todos los que creemos en la música, o en la cultura en general. Una ciudad como Barcelona necesita de más locales donde se pueda disfrutar de música en vivo, y ponernos, en este sentido, al nivel de otras grandes ciudades europeas. Tener un circuito de salas pequeñas ayudaría, por ejemplo, a que bandas que empiezan se foguearan y curtieran poco a poco en el escenario.
-Finalmente te queremos interrogar sobre tu faceta de periodista musical. Has escrito para muchísimos medios: musicales como Ruta 66, Mondosonoro, Go Mag, Popular 1, Rockdelux, y generalistas como el Periódico de Cataluña o Playboy. Conectando con lo que habíamos mencionado antes de los grandes cambios que ha habido en los últimos años en nuestra sociedad, ¿cómo crees que ha evolucionado el periodismo musical?
Tengo que decir que no especialmente para bien. Hay firmas consolidadas, pero para los que empiezan, y para muchos de los que llevamos en esto tiempo, ha habido una “amateurización” de este trabajo. Casi podemos decir que se puede considerar una especie de hobby. Desde luego no es algo que ocurra solamente en esta ocupación; tiene que ver con una cierta degradación del concepto de trabajo que ocurre en estos tiempos. Por otro lado, estar presente en los medios te ayuda a darte a conocer, a darte visibilidad a ti misma y por extensión, a aquello (discos, giras, festivales) que estés promocionando en el momento.
Agradecer a May González de 66 rpm, y a la propia Alicia, una vez más, las facilidades dadas para que realizáramos esta entrevista. Así mismo, queremos dar las gracias y felicitar al fotógrafo Desi Estévez por las preciosas imágenes que la ilustran.
Ricard.
Os dejamos con música de Santi Campos, Xebi SF y The Cat Empire: